Si en la historia de la educación y de las letras en México hay personajes identificados con el grupo del Ateneo de la Juventud y que son reconocidos del todo como Alfonso Reyes, José Vasconcelos, Pedro Henríquez Ureña, Antonio Caso y Julio Torri, hay un postergado. Tal es el caso de Mariano Silva y Aceves, estudiado en los últimos años por Serge I. Zaitzaeff, quien con un estudio previo publicó algunos de sus textos inéditos y una antología iniciada por otros, como la de Cuentos y Poemas estudiadas por Antonio Castro y Leal en 1964.
Tal vez fue el huracán de la Revolución Mexicana y el hecho de que Reyes, Vasconcelos, Caso y Torri ocuparan puestos de importancia en el gobierno federal que les dieron mayor brillo del que ya por talento natural poseían, mientras que Mariano Silva casi siempre vivió para la Universidad Nacional.
En este ensayo mostraremos su vida de ateneísta y humanista; su entrega a la academia universitaria confirmada por sus acciones y obras; su amistad con los aquí mencionados, menos con Caso que fue lo contrario, todo ello entreverado por anécdotas y sucesos de gran relevancia a través de su biografía.