El sentido de la vida no era un interrogante, formaba parte de ellos, de un modo muy natural, en sus talleres, en sus campos. Cada profesión había creado su propia mentalidad, su propia manera de ser. [...] Hoy somos todos iguales, todos unidos por la común indiferencia hacia nuestro trabajo. Esta indiferencia ha pasado a ser pasión. La única gran pasi?n colectiva de nuestro tiempo.