Un bello homenaje a su madre. Interesantes los relatos de la guerra y los años siguientes.
Muy tristes los últimos años, con la demencia. Creo que ya no hay necesidad de llegar a eso. Ahora hay Dignitas.
Una narración simple, corta, directa, de la relación de la autora con su madre, a partir de la muerte de ésta. Earnaux tiene un estilo austero que sin embargo llega.
Es un libre hermoso. Lo he terminado llorando. No pude parar de llorar. Es hermoso y triste y verdadero.
Mi madre también lo es, será que todas las mamás tienen sobre nosotras una energía que aplasta?
“La habitación de al lado” Almodóvar