Quién soy yo en una sociedad traumatizada

Las personas traumatizadas no suelen ser conscientes de en qué medida toda su voluntad está orientada hacia los agresores que los han convertido en víctimas. En lugar de estar en su identidad, viven en un enredo simbiótico con las personas que los han traumatizado

La tendencia a creer en las fantasías, ilusiones o creaciones mentales más que a confiar en la propia percepción, los propios sentimientos y los propios pensamientos aumenta enormemente si se han sufrido psicotraumas

Por suerte, también hay personas con sentimientos y pensamientos claros y con una sana seguridad en sí mismas a las que no se les impresiona o manipula fácilmente con premios y castigos. Saben lo que quieren y lo que no y, por iniciativa propia, se comportan en consecuencia

una psique traumatizada le resulta difícil diferenciar de forma clara y fiable entre dentro y fuera, antes y ahora, yo y tú, realidad y ficción.

Por ello recomendó liberarse de lo que crea el sufrimiento:

Podemos aprender a volver a estar con nosotros mismos y a relacionarnos con los demás con benevolencia y simpatía.

la destructividad de nosotros los humanos es la traumatización de nuestra psique,

No debemos permitir ni aceptar convertirnos en esclavos de nuestra propia psique dañada!

No está determinada desde el nacimiento por los «genes», sino que la marcan nuestras relaciones y estilos de vida (Bauer, 2002).

Si estamos en armonía con nuestra psique, podemos establecer claridad y orden en nuestro entorno. Tal como es adentro, es afuera