Ser extranjero es construir un todo sobre una nada
y sostenerlo con hilos inexistentes,
por el tiempo que dure, con sólo tu soplo cansado.
Es querer encontrar las mismas estrellas en otras
[latitudes.
Aprender otras canciones y sentirte
piel roja o marciano
en donde los normales son ellos
los pelo amarillo
o los ojos rasgados.