Por desgracia estamos demasiado acostumbrados a leer los evangelios como una historia ya sabida. Pensamos que ya conocemos las cosas que se narran en ellos, lo que va a ocurrir y cuál será el final. Pero, ¿y si el texto tuviera más profundidad de la que creemos, perspectivas hasta ahora desconocidas para nosotros?Este libro es una invitación a descalzarse antes de empezar a leer los evangelios y dejarse atrapar por su intriga. A contemplarlos como un libro desconocido que se lee por primera vez, sorprendiéndonos con un desenlace que no esperábamos. Se trata de meternos en la trama que narran y de acompañar a sus personajes en sus evoluciones. Para ello se necesita una actitud de asombro y respeto ante lo desconocido, como cuando se visita un país extranjero o se aprende una lengua extraña. Es importante tomar conciencia de la impresión que produce lo que leemos y de los aspectos que resultan chocantes, extraños, enigmáticos o intrigantes. A lo mejor nos están indicando caminos nuevos para poder seguir al Maestro.