Estado de las autonomías desarrolló un modelo que retrasó el proceso. Luego llegó el optimismo de los noventa, el crecimiento económico y los primeros años de un siglo xxi que nos llevaba a los territorios a la clase media deseada, o eso creíamos. Poco después de la irrupción de la crisis de 2008, se puso de manifiesto la despoblación del medio rural, que ocupó la mayor parte de la agenda en lo que se refiere a la cuestión de las desigualdades territoriales, dejando de lado todo el tema de las identidades colectivas.