Kateri es una joven geóloga de ascendencia Cherokee. Como científica, no debe ni puede creer en las leyendas milenarias que le contaba su abuela, aunque desde la muerte de la anciana ha tenido una serie de sueños perturbadores. En todos ellos aparece un hombre de pelo oscuro, un guerrero misterioso, que o bien lucha a su lado o la apuñala hasta matarla… Doce días antes del 21 de diciembre de 2012, la fecha del fin del mundo según el calendario maya, Kateri recibe una piedra procedente de un yacimiento maya. Lleva grabadas unas inscripciones que, de ser auténticas, obligarían a reescribir todos los tratados de la historia de la humanidad. Ese mismo día se entera de que desciende por línea femenina de las Guardianas del Apocalipsis y de que, por lo tanto, tiene en sus manos la posibilidad de cerrar las puertas del inframundo. Entonces entra en escena Ren, el mismo guerrero misterioso con el que ha soñado, un Cazador Oscuro maltratado por todos y por todo. Alguien a quien han traicionado tantas veces que está acostumbrado a protegerse. Pero ahora siente que debe proteger a esa hembra humana, la única que puede evitar que el mundo se acabe, y la primera persona que le enseñará que el amor existe.