observa que hace aproximadamente 10.000 años –cuando finaliza la última glaciación y se inicia la Revolución Agrícola que permitió el pasaje del nomadismo al sedentarismo– la temperatura se acerca al eje mencionado de 0°C y se mantiene con esa medición hasta los inicios del siglo XX, momento en el que comienzan a manifestarse las consecuencias del uso intensivo de combustibles fósiles iniciado con la Revolución Industrial desde fines del siglo XVIII y sobre todo durante el siglo XIX.