Michiko Aoyama

Sea como sea, el porqué da igual. A mi parecer, lo importante es que tengas ganas de aprender.

Las cosas se aprenden con el tiempo.

Pondría en orden mi vida, haría cuanto estuviera en mis manos y aprendería de lo que se me presentara delante.

Tenía que ocuparme de un sinfín de cosas, pero había dejado de excusarme con que no tenía tiempo.

Debía pensar en cómo gestionar el tiempo del que disponía.

incluso cuando ya has comenzado, siempre se puede rehacer según prefieras.

Si un plan o alguna expectativa no te salen bien, no es necesario considerarlo una desgracia o un fracaso. Porque eso es lo que provoca la transformación, en ti y en tu vida.

Quizá yo no era un fracaso, sino que no había sabido escoger bien el lugar para dar lo mejor de mí.

pero aprendí que si te esfuerzas y das lo mejor de ti también pueden venir a buscarte.

Cuando trabajaba, quería disponer de tiempo para relajarme y ahora no sé qué hacer con él. Hasta he llegado a pensar que el resto de mi vida ya no tiene sentido.

Todo ocurre gracias a los puntos de conexión que tenemos con otras personas, tanto en el pasado como en el futuro