Desde el Santiago de Chile de inicios de los setenta, un joven estudiante de ingeniería, azuzado por su memorable profesor de Fundamentos Matemáticos, va tras la huella de Kurt Gödel, el genial lógico que con dos teoremas perturbadores desbaratará toda la tradición matemática, y que muriera desquiciado y anoréxico en un moderno hospital estadounidense. Antes de morir, Gödel remontó sus delirios febriles para descubrir, primero como una intuición y luego como una paranoica epifanía, una conspiración milenaria: la conspiración de Babel, misteriosa conjura que ha frustrado permanentemente todo intento de la Humanidad por instaurar la Era del lenguaje y de la razón. La Viena nazi de los años treinta, la pulcra y refinada Princeton de los cuarenta, y el Santiago humeante previo al Golpe son las estaciones donde es descubierta y reconstruida esta trama de la ciencia y del poder. Allí viven sus héroes y sus nefastos enemigos, pero no sólo allí: debajo del mismo Dios, y a veces hablando en su nombre, la conspiración de Babel acecha en cada lugar donde un loco empecinado y soñador eleve el emblema de la verdad.