—Vamos a hablar con ese tal Bryern a ver qué nos cuenta. Aunque debas enfrentarte a esa cosa, no tienes por qué ir sola. Podrías llevarte un batallón de caballeros o, en su defecto, a mí.
—¿Crees que eres el equivalente a un batallón de caballeros? —pregunta Jude, sonriendo.
Podría serlo, piensa Cardan, aunque es imposible anticipar qué efecto tendrá el mundo mortal sobre su magia. En una ocasión hizo surgir una isla del fondo del mar. Cardan se pregunta si debería recordárselo a Jude, se pregunta si la dejó impresionada.
si, la dejo impresionada